Tres años más tarde de la Revolución del Parque, esta vez dirigida por Hipólito Yrigoyen y Aristóbulo del Valle y con el objetivo de conseguir la renuncia del gobierno fraudulento del Partido Autonomista Nacional comenzó la insurrección armada conocida como Revolución Radical de 1893. Ese día en San Luis los revolucionarios liderados por Teófilo Saa tomaron rápidamente todas las reparticiones oficiales y obligaron al gobernador a renunciar instalándose un gobierno provisorio con Saa como gobernador.
Dos días después la revolución estallaría en Santa Fe y Buenos Aires sumándose por último Corrientes, los combates y disputas durarán hasta el 25 de agosto para continuar bajo el liderazgo de Leandro Alem entre 7 de septiembre y el 1 de octubre en las que se sumaría la provincia de Tucumán.
La revolución fue sofocada finalmente por el gobierno autonomista, pero dejó en relieve el poder que tenía la Unión Cívica Radical frente a la sociedad y la opinión pública.